El informe “Consecuencias socioeconómicas del embarazo adolescente en México”, del Fondo de Población de las Naciones Unidas, muestra cifras alarmantes sobre la tasa de fecundidad de niñas y adolescentes, además de esclarecer el grave impacto que tiene en la economía del país.
Por: Laura Ilarraza | @IlarrazaLaura
“El embarazo en adolescentes es un gran reto en América Latina y el Caribe. La tasa de fecundidad de adolescentes de la región es mucho mayor que el promedio mundial, y uno de cada cinco partos corresponde a mujeres menores de 20 años”, señaló Arie Hoekman, representante de UNFPA en México, durante la presentación del documento.
En México se creó en 2015 la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA), la cual tiene como objetivo reducir a la mitad los embarazos de adolescentes de 15 a 19 años y eliminarlos nacimientos en niñas de 10 a 14 años. No obstante, frente a la realidad de las cifras, el representante del UNFPA advirtió que esta meta enfrenta un panorama muy complejo.
“Si de cada 100 niñas que inician sus 15 años, más de 30 habrán tenido un hijo vivo antes de llegar a los 20 años, no se alcanzarán las metas de la Estrategia nacional para la prevención del embarazo en adolescentes”, aseveró
La crítica situación del embarazo adolescente
Con base en cifras de la Secretaría de Salud (SS) para 2018, el informe indica que en 18.5% del total de nacimientos registrados ese año las madres tenían entre 10 y 19 años. Ese mismo año el Sistema Nacional de Salud registró 269,823 consultas de embarazo en adolescentes mujeres de 15 a 19 años, es decir, el 5% de mujeres mexicanas en ese rango de edad.
Además, para las niñas de 10 a 14 años, la razón de fecundidad era de 1.71 nacimientos por cada mil niñas en 2009, pasó a 2.01 en 2014, para llegar a 2.28 en 2019, lo que significa un alarmante incremento de las nacimientos en los que las madres son niñas de 10 a 14 año. Asimismo, aquellos de niñas de 12 a 14 años pasaron de 2.82 a 3.77 entre 2009 y 2018.
¿Cuánto le cuesta a una sociedad y al Estado que sus niñas y sus adolescentes se embaracen?
El impacto económico total del embarazo adolescente (EA) y la maternidad temprana (MT) en México sobre la actividad productiva es de casi 63 mil millones de pesos, es decir, más de de 3.2 mil millones de dólares.
“El impacto agregado debido a la pérdida de ingresos, empleo y actividad laboral que representan los costos económicos del EA y de la MT para el país es de 62.98 mil millones de pesos, los cuales puestos en contexto representan 0.27% de PIB”, señala el informe.
Cada año, el Estado mexicano deja de recaudar “poco más de 11 mil millones de pesos por concepto de Impuesto al Valor Agregado (IVA) e Impuesto a la Renta Personal (IRP)”, debido a la poca participación laboral que genera el embarazo adolescente.
Además, los servicios públicos de salud de México destinan cerca de 6 mil millones de pesos mexicanos para atender embarazos y partos de adolescentes y se estima que cada año se pierden 6,529 años de vida potencial y 5,151 de vida productiva en el país por muertes relacionadas ambos.
Vivir con menos oportunidades
UNFPA destaca también el gran peso de la brecha entre las mujeres que fueron madres tempranas y aquellas que no tuvieron hijos en la adolescencia. Entre ellos se encuentran el rezago educativo, la brecha laboral y la desigualdad en los ingresos.
El abandono y el rezago educativo vinculados al EA y la MT representan para México una pérdida anual de 31 mil millones de pesos. “Un embarazo durante la adolescencia se relaciona con un impacto negativo en el logro educativo y la situación socioeconómica futura”, sentencia UNFPA.
“Los ingresos anuales de las mujeres que han tenido hijos siendo adolescentes resultan 31.6% menores a los de quienes fueron madres en edad adulta (…) el ingreso laboral anual promedio de estas últimas es de $68,190, mientras que para quienes tuvieron hijos(as) en la adolescencia es de $46,627”.
Lee también: “EMBARAZO ADOLESCENTE: VIDAS TRUNCADAS”
Consulta aquí el documento completo:
milena_mexico_2020
