Por el bien de la nación

Por el bien de la nación, primero los niños: la violencia infantil y la responsabilidad del Estado de protegerlos, Este fin de semana terminé de ver la serie “The trials of Gabriel Fernández” de Netflix, la cual expone el caso de un niño que fue muerto a golpes por parte de sus padres en los Estados Unidos, y derivado de lo cual, no solo llevan a juicio a los responsables de su asesinato, sino que incluso pone bajo proceso a los servidores públicos que no hicieron nada para impedirlo.

Escrito por: Blanca Elena Gómez

Mientras lo veía, recordaba tantos casos que acaparan los distintos medios de comunicación de nuestros propios niños mexicanos. Para tener un panorama general, UNICEF dio a conocer que encuestas realizadas en nuestro país antes de la pandemia mostraban ya que el hogar es usualmente el lugar más peligroso para las mujeres y sus hijos e hijas, pues los resultados mostraban que más de 6 de cada 10 niños y niñas de 1 a 14 años han experimentado violencia a nivel familiar, situación agravada ahora por el confinamiento.

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Aunado a lo anterior, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a marzo de 2022, la situación de violencia en México cobró la vida de 595 personas de 0 a 17 años. A esto se suma el riesgo de reclutamiento de entre 145,000 y 250,000 niñas, niños y adolescentes por parte de grupos delictivos y del crimen organizado, de acuerdo con estimaciones de la REDIM y del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC).

Además, en términos de calidad de vida, para 2020 más de la mitad de la población infantil y adolescente en el país vivía en situación de pobreza, una cuarta parte presentaba carencias por acceso a una alimentación nutritiva y de calidad, y una de cada 10 presentaba rezago educativo, de acuerdo con CONEVAL.

Según la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, el Estado mexicano debe garantizar el pleno ejercicio, respeto, protección y promoción de los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes conforme a lo establecido en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en los tratados internacionales de los que el Estado mexicano forma parte, así como crear y regular la integración, organización y funcionamiento del Sistema Nacional de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, a efecto de que el Estado cumpla con su responsabilidad de garantizar la protección, prevención y restitución integrales de los derechos de niñas, niños y adolescentes que hayan sido vulnerados.

Pese a este mandato, el Estado se muestra incapaz de poder garantizar la provisión de los derechos humanos de nuestros niños. Después ver el caso de Gabriel, pienso que, si a cada autoridad que no hizo su trabajo para evitar la violencia hacia niños, niñas, y jóvenes se le pudiera exigir responsabilidad jurídica por su omisión de acción, tal vez el compromiso adquiriría un revitalizado interés. Mientras tanto, las cifras negras aumentan, y el Estado sigue fallando en su responsabilidad de proteger, es importante tomar en cuenta que por el bien de la nación, primero los niños.

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