El Unicef informó que, aunque en algunos países ya se han reabierto las escuelas, en una de cada cuatro aún no se tiene una fecha específica para el regreso, pese a los efectos devastadores que tiene en niñas, niños y adolescentes la interrupción de la educación.
Al respecto, la OMS considera que el hecho de que los niños puedan regresar a clases es “de vital importancia”, por lo que las agencias internacionales exhortan a los países a que la reapertura escolar con medidas de seguridad y protección sanitaria adecuadas sea una prioridad.
Aunque los niños y los adolescentes suelen presentar un cuadro leve de la enfermedad y no se conocen muy bien los efectos a largo plazo del COVID-19 en este grupo de edad, también hay casos en los que la condición se agrava.
No obstante, para Tedros Adhanon, director general de la OMS, el cerrar los centros educativos debe ser un último recurso, temporal y debe implementarse únicamente en áreas donde se presente una transmisión intensa de COVID-19.
Por eso ha instado a los países a que las escuelas se reabran, pero teniendo en consideración las medidas adecuadas que los protejan de contagios.
Según las recomendaciones del Unicef, la reapertura de escuelas debe incluir una implementación de políticas, procedimientos y recursos que garanticen operaciones escolares seguras en las que la prioridad sea el bienestar, la protección y el derecho a la educación de los niños, niñas y adolescentes, principalmente los más vulnerables.
La características del regreso a clases debe incluir las siguientes características:
-Específico para el contexto de cada país.
-Partir de la decisión del gobierno.
-Estar basado en evidencia sobre la situación de salud pública.
-Guiarse por el interés superior del niño establecido en los tratados internacionales.
El Fondo recomienda también que se cumpla con un enfoque intersectorial que fomente la colaboración entre los proveedores de salud, nutrición, agua, saneamiento, higiene, educación, protección e igualdad de género.
Aunque en los lugares en los que todavía no se regresa a clases ha existido un esfuerzo para que se continúe el aprendizaje a distancia, ha sido claro que la efectividad de este sistema depende de los recursos y la infraestructura con la que cuente la población para ello.
Por eso la UNESCO, la OMS y UNICEF destacan la importancia de impulsar un regreso a clases que incluya la capacitación de maestros, infraestructura física y digital, instalaciones sanitarias y de higiene adecuadas, agua limpia y jabón, así como otras medidas de sanidad y saneamiento e información para estudiantes y docentes.
